Las hojas desecadas de la congorosa se comportan como uno de los mejores antiespasmódicos y calmantes de dolores de estómago e intestinales, recomendadas contra gastritis, cólicos, retorcijones de barriga, espasmos, etc., y muy especialmente contra la úlcera de estómago o duodenal.
Las hojas desecadas de la congorosa se comportan como uno de los mejores antiespasmódicos y calmantes de dolores de estómago e intestinales, recomendadas contra gastritis, cólicos, retorcijones de barriga, espasmos, etc., y muy especialmente contra la úlcera de estómago o duodenal.